Biografía de Marco Aurelio

Muchos conocen su nombre, pocos sus apellidos. Marco Aurelio Antonino Augusto (121-180), es conocido por ser el último de los cinco emperadores buenos del Imperio Romano. Nace en el año 121, con el nombre de Marco Annio Catilio Severo, en la ciudad de Roma, en el seno de una familia prominente y establecida. No hay mucha información de su infancia, de lo poco que se conoce es que perdió a su padre, un pretor* hispano nacido en Córdoba, cuando tenía 3 años de edad y se crió con su madre. Esta fue la que le enseñó los valores con los que de adulto predicaría.

*Un pretor era un magistrado romano cuya jerarquía se alineaba inmediatamente por debajo de la de cónsul

Ya siendo adolescente practicaba deporte, especialmente artes marciales como el boxeo y la lucha libre, y era un ávido cazador.

Desde muy pequeño ya mostró interés por la filosofía y las retóricas griega y latina. Destacaba de los niños de su edad por su pensamiento lógico y su lucha por la justicia social.

Adriano, el emperador que supo ver la nobleza de Marco Aurelio

El emperador reinante en esa época, Adriano, al estar cerca de la muerte y no tener descendencia tuvo que buscar sucesores dignos de valía y en Marco Aurelio veía a un líder nato, noble y leal.

La presión de los pensamientos de Adriano, lejos de acobardar a Marco Aurelio, le sirvieron para formarse física y mentalmente con mayor intensidad para ocupar ese puesto de la manera más honorable.

Adriano nombró sucesor a Lucius Ceionius, pero éste murió inesperadamente, lo que le hizo escoger a Antonino Pío, un senador sin descendencia, pero con la condición de que nombrara como sucesores a Lucio Vero (Lucius Verus) y a Marco Aurelio, de ahí que cambiara su nombre a Marcus Aurelius Antonius.

Antonino cumplió su palabra y tras su adopción formal, les designó como sus herederos y sucesores al trono el 25 de febrero del año 138, teniendo Marco Aurelio la temprana edad de 17 años.

Tras la muerte de Antonino en el año 161, los sucesores ocupan conjuntamente el trono.

Estudios y reinado

Marco Aurelio estudió con Herodes Atticus, un retórico ateniense y Marcus Cornelius Fronto, su instructor de latín. Fue nombrado cónsul dos veces.

Lucio Vero, el sucesor junto con Marco Aurelio, fallece 8 años más tarde quedando éste como único emperador hasta el 17 de marzo del año 180, fecha en la que éste fallece, dando por finalizado su trono y el período conocido como Pax Romana, una etapa para el Imperio Romano dorada ya que fue un largo periodo de estabilidad caracterizado tanto por su calma interior como por su seguridad exterior. Esto hizo que el Imperio alcanzara su máximo desarrollo económico hasta la fecha y la mayor expansión territorial conocida hasta el momento. Pero no todo fue un camino de rosas, Marco Aurelio gobernó con numerosas guerras a sus espaldas, las más importantes las del Imperio de Partia y las relacionadas con el surgimiento del cristianismo y las tribus bárbaras.

Marco Aurelio gobernó el Imperio Romano del año 161 hasta el 180, año en el que murió en su cuartel militar de lo que ahora conocemos como la ciudad de Viena. Unos años antes nombró co-emperador a su hijo Commodus, quién sería su sucesor. Algunos historiadores afirman que se consideraba desdichado por haberle ofrecido la mejor de las educaciones a su hijo para que aún así, él no obedeciera el camino de la virtud.

Matrimonio y descendencia

La futilidad de la vida en aquella época hacía que el Momento Mori tomara un protagonismo que en la sociedad actual no tenemos (por suerte y desgracia)

Contrajo matrimonio con Faustina la Menor en el año 145. Durante sus treinta años de matrimonio, Faustina dio a luz a trece hijos, de los cuales solo un varón y cuatro mujeres sobrevivieron a su padre. La mortandad en aquella época era elevada y común en personas con temprana edad. Tras los rumores de que Marco Aurelio podía haber fallecido (en realidad solo cayó enfermo), Faustina, con ánimo de proteger a su familia, marchó a Egipto para acostarse con Avidio Casio, el segundo hombre más poderoso después de su marido, para que le ofreciera protección a ella y a su familia. Marco Aurelio, al sentirse traicionado por su mujer, pese que ésta, negara los hechos, decidió envenenarla y mandó matar a Avidio Casio. 

 

Poder y corrupción

De sobra es sabido que el poder corrompe. Lo fascinante de este estoico es que pese a pasar a ser uno de los hombres más poderosos de la época, siguió gobernando con la misma moral, ética y virtud que siempre.

Muchos hablan de que Marco Aurelio pasó de emperador a filósofo y lo cierto es que ya era considerado filósofo antes de ser nombrado emperador.

Piensa en una herramienta poderosa, Internet, por ejemplo. Internet no es malo ni bueno en sí. Todo depende del uso que se le quiera dar o para qué fines se quiera utilizar. Con un botón, podemos usarla como fuente de información rápida y veraz y a su vez, casi con la misma facilidad, podemos cometer delitos de muchos tipos. ¿Qué es lo que cambia aquí? Sin duda, no es la herramienta, es la persona que la utiliza y sus intenciones.

Pues siendo emperador, ocurre lo mismo. Puedes gobernar para sembrar el bien o traer el caos y la devastación. Con una sola decisión, sentado en un sillón, podías ocasionar la muerte de miles de inocentes o cumplir los lujos y caprichos más mundanos habidos y por haber. 

Pese a ser, prácticamente, dueño del mundo, su mente no fue corrompida por lujos, placeres o vanalidades. Es aquí donde reside su fuerza y pureza.

Según Edward Gibbon, un destacado historiador y Matthew Arnold, un reconocido ensayista, Marco Aurelio era digno del cargo que ostentaba.

edward gibbon

“El vasto territorio del Imperio Romano estaba gobernado por el poder absoluto, bajo la guía de la sabiduría y la virtud”

Sus valores trasladados a día de hoy

A Marco Aurelio se le recuerda, aún a día de hoy, como uno de los mejores emperadores de la historia precisamente por haber actuado bajo el paraguas de la sabiduría y la virtud. Y esto lo encontró gracias al estoicismo, lo que le diferenciaba notablemente de los demás emperadores u hombres con cargos importantes.

Aquí me gustaría reiterar esto. Piensa en el hombre más poderoso del mundo a día de hoy transmitiendo valores sobre cómo ser más justo, más sabio, más virtuoso, más inmune a los placeres y la tentación… Para mi casi impensable e inimaginable.

Meditaciones de Marco Aurelio

Uno de los libros más conocidos del estoicismo es el de “Meditaciones” de Marco Aurelio, libro escrito los últimos 10 años de su vida (se estima que fue escrita entre los años 170 y 180), mientras luchaba contra los invasores extranjeros. Una mente en paz en medio de toda aquella devastación y muerte le hace digno de ser un líder mundial. Esta obra no era más que su diario personal en el que iba anotando sus reflexiones del día a día. Escrito en griego y compuesto por 12 tomos en total.

Este libro ha sido considerado uno de los tratados filosóficos más importantes de la época y es una ayuda clave para entender el estoicismo.

Marco Aurelio agradece en su libro “Meditaciones” a su maestro Quinto Junio Rústico el haberle enseñado el estoicismo en gran parte gracias a los escritos de Epicteto. Heráclito fue una viva inspiración para él también y eso se ve reflejado a lo largo del libro. Estos fueron una inspiración para él, una forma de no perder la cordura aún poseyendo todas las riquezas y el mayor de los poderes que se le podía otorgar a un hombre, el ser nombrado Emperador.

Meditaciones es el texto definitivo sobre autodisciplina, ética personal, humildad, autorrealización y fortaleza.

Si lo lees y no te cambia profundamente, probablemente sea porque, como dice Marco Aurelio, «lo que no transmite luz crea su propia oscuridad»

Ejercicios prácticos de Marco Aurelio

Vivir para los estoicos era un arte. Cada día era un nuevo comienzo y cada adversidad una oportunidad de aprendizaje. Llegar a practicar las virtudes estoicas es un arduo camino de madurez mental que solo se consigue con práctica y constancia. El objetivo, ser nuestra mejor versión a cada día que pasa.

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concéntrate en el presente

Dos de los grandes errores del ser humano son 

1: Pensar que nuestro yo del mañana será mejor que nuestro yo actual. Sin el trabajo de hoy, tendremos los mismos defectos de los que ahora nos quejamos e incluso puede que peores. El cambio empieza por un mismo ahora. Esperar el mejor momento para empezar algo no sirve. Nunca encontraremos el mejor momento asi que empezar ya es la única alternativa.  

2: Escudarnos bajo el famoso “seré feliz cuando…”: seré feliz cuando acabe el instituto. Seré feliz cuando acabe la carrera. Seré feliz cuando encuentre el trabajo de mis sueños. Seré feliz cuando me case. Seré feliz cuando tenga hijos. Han pasado 30, 40, 50 años y todavía estamos en ese “cuando” inalcanzable porque cuando realmente llega, el foco ya está en lo siguiente, impidiéndonos disfrutar del camino. Y así lo único que pasa es la vida.

Centrarnos en lo que estamos haciendo, y a poder ser, en una tarea al mismo tiempo, hará que estudiemos mejor, que entrenemos mejor o que leamos mejor. En definitiva, que hagamos mejor todo lo hagamos y esto derivará en mejores resultados.

 

Marco aurelio

No dejes que tu imaginación sea aplastada por la vida como un todo. No intentes imaginar todo lo malo que podría suceder. Quédese con la situación actual y pregunte: “¿Por qué es tan insoportable? ¿Por qué no puedo soportarlo? » Te avergonzará responder. Luego recuerda que el pasado y el futuro no tienen poder sobre ti. Solo el presente, e incluso eso puede ser minimizado. Solo marca sus límites. Y si su mente trata de afirmar que no puede resistir eso … bueno, entonces, qué vergüenza

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Practicar la virtud

Es fácil sucumbir a la autocompasión cuando comenzamos a decirnos, muchas veces autoengañándonos, que carecemos de ciertos talentos o habilidades. En vez de ser tóxicos con nosotros mismos debemos centrarnos en las cosas que están bajo nuestro control: nuestra capacidad y potencial para la acción virtuosa. 

De muchas de las grandes frases de Marco Aurelio, esta lo definiría bien:

 

Marco aurelio

Nadie podría acusarle de ser ingenioso. Está bien, pero hay muchas otras cosas que no puedes reclamar que «no has entrado en ti». Practica las virtudes que puedes mostrar: honestidad, gravedad, resistencia, austeridad, resignación, abstinencia, paciencia, sinceridad, moderación, seriedad, alta mentalidad. ¿No ves cuánto tienes para ofrecer, más allá de excusas como «no puedo»? Y aún así te conformas con menos

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Encuentra la inspiración en otros

No envidies, solo trata de seguir. Fíjate en ese escritor, deportista, cocinero, informático, bioquímico al que admires. Trata de seguir sus pasos en la medida de lo posible. Incluso el propio Marco Aurelio, el hombre más poderoso del mundo, se fijaba en facetas como la humildad, la disciplina o la resilencia de otros.

 

Marco aurelio

Cuando necesites aliento, piensa en las cualidades que tienen las personas que te rodean: la energía de este, la modestia de uno, la generosidad de otro, etc. Nada es tan alentador como cuando las virtudes se materializan visiblemente en las personas que nos rodean, cuando nos duchamos con ellas. Es bueno tener esto en cuenta

Una de las características del estoicismo que le hace diferenciarse de otras filosofías de vida es su eminencia meramente práctica. Religiones como el budismo suelen ser más teóricas, el estoicismo además de hacernos pensar, también tiene un componente activo. De nada servirá retener en la mente si al final nuestras acciones no demuestran lo pensado.

Frases estoicas de Marco Aurelio

Es difícil hacer una selección de la larga lista de reflexiones a las que llegó Marco Aurelio. Aquí una selección de sus 20, a mi parecer, mejores frases estoicas:

“Al amanecer, cuando tienes problemas para levantarte de la cama, dite a ti mismo:‘ Tengo que ir a trabajar, como ser humano. ¿De qué tengo que quejarme si voy a hacer para lo que nací: las cosas que me trajeron al mundo para hacer? ¿O es esto para lo que fui creado? ¿Acurrucarse debajo de las mantas y mantenerse caliente?»

“Cuando te despiertes por la mañana, dite a ti mismo: las personas con las que trato hoy serán entrometidas, ingratas, arrogantes, deshonestas, celosas y hoscas. Son así porque no pueden distinguir el bien del mal»

 

“Sí, puedes hacerlo; si haces todo como si fuera lo último que hicieras en tu vida y dejes de no tener objetivo, deja de dejar que tus emociones anulen lo que tu mente te dice, deja de ser hipócrita, egocéntrico e irritable

“No gastes más tiempo argumentando acerca de lo que debe ser un buen hombre. Sé uno.”

«El objeto de la vida no es estar en el lado de la mayoría, sino escapar de formar parte de los insensatos.»

«Debemos hacer el bien a los demás tan naturalmente como un caballo corre, una abeja hace miel o una viña da uvas.»

«Aunque vayas a vivir tres mil años o tres mil veces diez mil, recuerda que nadie deja atrás otra vida que esa que está viviendo y tampoco está viviendo otra que no sea la que deja atrás. Se iguala por tanto lo más duradero con lo más breve: el presente es igual para todos, como también lo que muere, y lo que dejamos atrás se manifiesta efímero por igual.»

 «Preocuparse de su propio cuerpo con mesura, no como si tuviera apego a la vida, sin llegar al maquillaje pero tampoco desde luego al abandono, de forma que por su propia diligencia precisaba poquísimo de la medicina, de sus medicamentos o ungüentos, de uso interno o externo; ceder

«El que no sabe qué es el universo no sabe dónde está. El que no sabe para qué ha crecido no sabe quién es. El que deja sin resolver una sola de estas cosas no podría decir ni qué es el universo ni para qué ha crecido. Entonces, ¿cómo te parece que es quien va detrás del ruido de gente que aplaude sin saber ni dónde está ni quién es?»

«No sueñes con las cosas que no tienes, más bien reconoce las bendiciones de las cosas que sí posees. Luego, recuerda agradecido cómo estarías de ansioso si tus posesiones no fueran tuyas»

«No sentirse exasperado, derrotado o abatido porque sus días no están llenos de acciones sabias y morales. Pero volver a levantarse cuando fallas, celebrar comportándote como un ser humano, aunque sea imperfectamente, y abrazar por completo la búsqueda en la que te has embarcado»

«Lleva una buena vida. Si hay dioses y son justos, no se preocuparán por qué tan devoto fuiste. En cambio, te darán la bienvenida basándose en las virtudes que has tenido en vida. Si hay dioses pero son injustos, entonces no te gustaría alabarlos. Si no hay dioses, entonces simplemente tu vida habrá terminado pero habrá sido noble y tu recuerdo vivirá en las memorias de los que amas.»

“La mente se adapta y convierte a sus propios fines el obstáculo para nuestra actuación. El impedimento para la acción avanza la acción. Lo que se interpone en el camino se convierte en el camino «.

“Sin descuido en tus acciones. No hay confusión en tus palabras. No hay imprecisión en tus pensamientos.

«El arte de la vida es más parecido a luchar que a bailar»

 «La felicidad de los que quieren ser populares depende de los demás. La felicidad de los que buscan placer fluctúa con el humor que está fuera de su control. Sin embargo, la felicidad de los sabios viene de sus actos.»

“Si no conviene, no lo hagas; si no es verdad, no lo digas.”

«La única riqueza que conservarás para siempre es la riqueza que has obsequiado.»

“Todo lo que escuchamos es una opinión, no un hecho. Todo lo que vemos es una perspectiva, no la verdad.”

Marco Aurelio

Siempre tienes la opción de no opinar al respecto. No hay necesidad de molestar tu alma por cosas que no puedes controlar. Esas cosas no están pidiéndote que las juzgues. Déjalas en paz

Representaciones de Marco Aurelio en la Tierra

Actualmente existen dos representaciones de Marco Aurelio.

La primera original, la famosa estatua ecuestre de bronce, se encuentra actualmente dentro del museo Capitolino para su óptima conservación. En la Piazza del Campidoglio se muestra al aire libre una copia de la misma. 

Esta estatua tiene cierto valor puesto que es la única que perdura de un emperador romano de la época precristiana. Y esta perdura por un error, ya que normalmente fundían las estatuas de entonces para hacer otras que tuvieran relación con el cristianismo y esta no fue una más al confundirla con el emperador Constantino I el Grande, el encargado de cristianizar Roma. La silueta de Marco Aurelio subido a lomos de su caballo aparece actualmente en las monedas de 50 céntimos italianas.

El verano de 2008, un equipo de arqueólogos encontró pedazos de mármol de lo que sería una estatua de Marco Aurelio. De grandes dimensiones, estiman que la cabeza medía aproximadamente un metro y su peso ronda los 30 kilos.

Estiman que esta y otras estatuas de la época como las de Adriano y Faustina la Mayor, mujer de Antonio Pío, se encontraban en lo que era el antiguo baño romano de Sagalassos, un frigidarium, o piscina de agua fría en la que los asistentes se metían tras venir de los baños calientes.

6 Comentarios

  1. Marco Jiménez

    Muy ilustrativo. Gracias por compartir

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    • VICEnte j. Muñoz Sansano

      Me ha ENCANTADo. Muy completo y bien resumido.

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      • lauradolz

        Muchas gracias, Vicente! Se agradece tu comentario 🙂

        Responder
  2. Excelente,reportaje!

    Excelente reportaje!

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    • lauradolz

      Muchas gracias! 🙂 La biografía de este hombre es para leer y releer 🙂

      Responder

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